
INFORME REUNIÓN DE LABOR PARLAMENTARIA
La Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA) comenzó este jueves una jornada de paro por 24 horas. La medida cuenta con el respaldo de las centrales sindicales CTA-T y CTA-A, y con la adhesión del Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (SUTEBA) en la provincia homónima.
La jornada de protesta que se desarrolla en todo el país incluye ceses de actividades, movilizaciones y paros, de acuerdo a lo que resuelvan las distintas jurisdicciones provinciales. Así lo expresó CTERA a través de un comunicado difundido en sus redes sociales, en el que se detalla que las acciones tendrán como objetivo visibilizar los reclamos del sector y exigir respuestas concretas. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, los manifestantes se movilizarán hacia el Ministerio de Economía para reclamar la convocatoria a paritarias docentes.
No obstante, la organización aclaró que la “medida de fuerza mayor” quedará a criterio de cada seccional, lo que significa que el acatamiento podría variar en diferentes zonas del país. En consecuencia, algunas instituciones educativas podrían dictar clases normalmente, dependiendo del grado de adhesión de sus docentes.
En sintonía con la convocatoria al paro y la movilización, CTERA difundió además una carta en la que manifiesta su “enérgico rechazo” a la reforma del artículo 10° de la Ley 26.075 de Financiamiento Educativo. Según denuncian, esta modificación elimina la participación del Estado Nacional en las negociaciones por el salario mínimo docente, función que hasta el momento recaía en la Secretaría de Educación de la Nación.
Desde el gremio advirtieron que esta decisión “constituye un gravísimo retroceso en materia de derechos laborales”, ya que “atenta contra la paritaria nacional docente y vulnera el carácter federal y democrático del sistema educativo argentino”. Asimismo, sostienen que las medidas impulsadas por el gobierno “profundizan el vaciamiento del Estado, el desfinanciamiento de la educación pública y el desconocimiento de los derechos de los trabajadores de la educación”.
En provincia de Buenos Aires, siguen los ánimos caldeados. El paro del pasado 20 de mayo generó una respuesta inmediata por parte del gobierno. El viernes 17 de mayo, el Ministerio de Trabajo bonaerense dictó la conciliación obligatoria con el objetivo de suspender el paro y reactivar el diálogo.
La FEB, sin embargo, rechazó esa instancia y ratificó la huelga: “La conciliación obligatoria sólo busca cercenar el derecho a huelga”, publicaron desde la cuenta oficial del gremio en la red X.
El lunes previo a la medida, el ministro de Trabajo de la provincia, Walter Correa, fue contundente: “El trabajador o trabajadora que no concurra, obviamente se le va a descontar el día”. De esa forma, la gestión provincial anticipó que se aplicará el descuento salarial a quienes adhieran a la jornada de paro.
Una menor fue golpeada salvajemente por un grupo de jóvenes dentro y fuera de un local bailable del centro platense, ante la pasividad del personal de seguridad y los testigos. El caso se suma a una ola de violencia que sacude a la ciudad, donde crecen los robos, las entraderas y la indignación vecinal por la falta de respuestas oficiales.
Dos tramos de la ruta nacional 226 que conecta las localidades vecinas de Tandil y Balcarce permanecieron cortados varias horas de este domingo por el desborde de un arroyo que colapsó tras las lluvias registradas el sábado por la noche y domingo a la madrugada. Gendarmería Nacional actúa en la zona.