Se repite la historia de Báez Sosa: murió Lautaro, el joven de 19 años que salió a bailar y recibió una golpiza

El caso de Fernando Báez Sosa, el joven de 18 años que murió en manos de una patota a la salida de un boliche en Villa Gesell en enero de 2020, causó conmoción en todo el país. Su asesinato dejó al descubierto los recurrentes episodios de violencia que suceden en la nocturnidad y se creyó que a partir de lo sucedido, habría un cambio de comportamiento en las juventudes. Sin embargo, no fue así y nuevamente hubo que lamentar una muerte.

Se trata de Lautaro Diego Emanuel Alvaredo, de 19 años de edad, quién salió a bailar con sus amigos al boliche ‘Cyrux’ el domingo 5 de noviembre por la noche. En la madrugada del lunes, cerca de las 7 de la mañana, los patovicas del lugar lo sacaron del boliche luego de que protagonizara una pelea con otro joven.
 
 

El motivo de la riña habría sido un altercado que surgió luego de un altercado en el que rompieron los anteojos de uno de los amigos de la víctima. Una vez afuera del local bailable, se desató una brutal pelea que dejó a Lautaro tendido en el suelo. Tuvo que ser asistido y trasladado a un centro de salud donde determinaron que tenía muerte cerebral, ocasionada por fuerte golpe en la cabeza, que aparentemente habría sido producto de una patada.

Hasta el momento, hay dos sospechosos detenidos y un prófugo que está siendo buscado por las autoridades. El nuevo escenario que se produjo tras el deceso de Lautaro no modifica la situación judicial de los acusados ni la calificación de la causa, que investiga un “homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de tres o más personas”. Este delito es penado con prisión perpetua.

El hecho ocurrió en Gregorio de Laferrere, partido de La Matanza y es investigado por el fiscal Matías Folino, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Temática Homicidios Dolosos del Departamento Judicial La Matanza.